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Sangre o no sangre en el sudario de Turín.

29 de julio de 2016

Di Minno, Giovanni; Scala, Rosanna; Ventre, Itala; Gaetano, Giovanni de: “Blood stains of the Turin Shroud: beyond personal hopes and limitations of techniques”, Internal and Emergency Medicine,  (2016) 11, pp. 507–516.

 

El otro día encontré este artículo y, después de echarle un vistazo, me pareció que merecía la atención. El trabajo estaba presentado en una revista especializada y su formato era impecablemente académico. Además, en la página 508, al explicar la metodología empleada, prometía que se basaría en estudios sometidos al arbitraje y la revisión inter pares. Y me lo creí.

 

Empecé a sospechar porque el artículo, que pretende basarse en investigaciones analíticas sobre la existencia de sangre en la tela, se introdujera (y concluyera) con un apartado con todos los tópicos acerca de la historia oculta del sudario de Turín, el Mandylion, los pólenes, las capas bioplásticas … en fin, todos los recursos del sindonismo más rancio sin la más mínima reserva. Pero pensé que, probablemente, el artículo estaba escrito a dos manos. Una sería responsable de la parte científica propiamente dicha y la otra de la monserga sindonista. Pues no.

Me sorprendió que se admitiera sin restricciones la teoría de la sangre, basándose principalmente en los trabajos de Adler y Heller.  Por lo que tengo leído y he visto debatir en algunos foros, las conclusiones de estos dos sindonistas no siempre son concluyentes y no siempre han sido mantenidas  en medios especializados. Pero luego todavía me quedé más mosqueado viendo que los autores daban por buena la hipótesis de Adler de que la bilirrubina es la responsable del color anómalo de la sangre del lienzo de Turín. Esta teoría sí me consta que no ha sido nunca probada y se enfrenta a serias dificultades teóricas. Finalmente, mi mosqueo se convirtió en franco escepticismo cuando vi citado como fuente de apoyo al Dr. Baima Bollone, del que, a pesar de su –relativo- prestigio, no me consta que haya publicado nunca sus escritos sobre el sudario de Turín en revistas especializadas.

Así que me fui a la bibliografía y encontré que las citas sobre estudios relativos al grupo sanguíneo y la sangre en general provenían en muchos casos de publicaciones tan “serias” como  Sindon, Shorud Spectrum International, Theology and Science , los consabidos congresos sindonistas, editoriales generalistas o religiosas e, incluso, algún PDF sin datos editoriales.

No tengo ningún inconveniente en que se incluya este tipo de publicaciones en una bibliografía. No soy un fundamentalista de la revisión inter pares. Pero si se cita un PDF sin datos editoriales (y con un enlace que no funciona, para más INRI), habrá que justificarlo de algún modo. Por la categoría del autor o por medio de un comentario que garantice la fiabilidad de lo expuesto. En el artículo no se hace nada de esto. Y queda todavía peor que se incluya bibliografía no especializada cuando se ha proclamado enfáticamente, de manera innecesaria, por cierto, que eso no iba a hacerse.

En fin, yo diría que, una vez más, se confirma mi idea de que publicar en una revista con revisión inter pares  no significa más que uno ha dado a lo que escribe un formato “respetable”. Lo que vaya dentro de ese formato es harina de otro costal.

Por lo demás, los autores del artículo concluyen  que los métodos de estudio de trazas de sangre han avanzado mucho desde los años 80 del siglo pasado, lo que cuestiona los resultados obtenidos en aquella época. En base a esto, sugieren una metodología que podría proporcionar resultados más fiables. No tengo conocimientos para evaluar el método propuesto, pero esto parece una obviedad. Y yo añadiría una condición que me parece importante: que la investigación sea llevada a cabo por un equipo de arqueología científica realmente independiente. Los autores del trabajo no parecen ser ni lo uno ni lo otro, con lo que no es de extrañar que en su revisión del tema no consideren estas dos condiciones.

2 comentarios
  1. ConstantinoI permalink

    Jhon Heller y Alan Adler publicaron 2 artículos en revistas peer revue. Se les pasaron las muestras porque eran especialistas en la materia. Concluyeron que era sangre. Lo confirma el forense de Turín Baima Bolone. Pero parece que dudas de que sea sangre. ¿Qué criterio tienes para decir que un investigador es independiente? ¿Si concluye en en contra de la Síndone es independiente y si concluye a favor es un tendencioso llevado por su fe? Define tus criterios y luego clasifica. Por cierto, sabrás que Adler era judío…

  2. Bienvenido, Constantino:
    No puedo responderte en extenso porque estoy de viaje. Ten un poco de paciencia.
    En resumen: De los dos artículos que dices sólo uno concluía con seguridad que era sangre y ése es el que no ha leído casi nadie. No soy un beato de la peer review. Otros comentaristas han dicho que no era sangre y que los tests no eran los adecuados ni estaban cuantificados. Ni Heller ni Adler (por muy judío que fuera) eran especialistas en arqueología científica. Sus métodos no están homologados en la arqueología científica, por lo que he leído. Por lo tanto me abstengo de todo juicio sobre esta cuestión hasta que un equipo adecuado se encargue del tema. Por cierto, Baima Bollone no publicó jamás sus resultados en una publicación especializada, pese a que tenía prestigio para hacerlo, y decía muchas cosas que me hacen dudar de su ecuanimidad.
    De todas formas, la entrada no iba de eso. Era un comentario a un artículo que había leído. Las razones de mi escepticismo las he explicado en otras entradas.
    Un equipo de investigadores independientes es el que no es ni sindonista ni antisindonista. Los de la prueba de carbono 14 eran independientes y había algunos cristianos declarados.
    Un saludo. Vuelvo pronto.

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